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Hablando de un tema super nada que ver a ratos y que rara vez me doy el tiempo de pensar, pero que me importa y no puedo seguir evadiéndolo como suelo evadir cada situación que no me agrada; creo que no me queda más y lo debo dejar ir, a su "ambiente natural" por así decirlo, al lugar de donde si todo se hubiera dado a su favor desde un principio, nunca habría decidido huir, al lugar que sin duda alguna mejor le hace.
Quién soy yo para sacarlo de donde pertenece desde mucho antes de que yo llegara a su vida? es más, no soy nadie para siquiera intentarlo, y si llegara a tener la intención e intentarlo firmemente, no serían mucho los resultados, porque nada se puede hacer si no está lo más importante: las ganas y la motivación de salir de ese lugar, y a cambio de eso están las ganas eternas de seguir en ella, y aunque nunca me canso hasta conseguir lo que quiero, con eso esta vez dudo poder luchar.
Y a veces (aunque nuestros genios tiendan a no compatibilizar, aunque hasta sin vernos siempre buscamos la forma de pelear, aunque todo eso y más) creo que el impulso de agarrarlo de donde pueda y llevarlo conmigo lejos de todo me calcome, pero cuando logro pensar con la cabeza y darme cuenta de que no puedo, de que él por sobre todo no puede, creo anticuerpos en contra de él, y se forma toda una barrera demasiado difícil de derrumbar; y la situación se transforma como todo en mi vida en un puto círculo vicioso.
Por todo eso y más, prefiero hacer lo que hago, y ahora cada vez que alguna "cagada" me mande, y alguien o incluso yo misma, me reproche, voy a tener esta prueba escrita de que todo lo que hago lo hago por alguna razón, por una linda razón llamada escudo.




...fighted.