jueves, 26 de marzo de 2009

secreta presencia.

Cuando me encuentro sola(o acompañada) haciendo nada(o haciendo todo) ; mi cabeza, mi cabeza que jamás se detiene ; tiene un nombre y un apellido, nombre y apellidos que son tuyos. Me paso las horas recordándote en cada detalle de mi día, de mi noche, imagino tu rostro al despertar, creo verlo a mi lado, con esos ojitos tan tuyos, que ya los siento tan míos. Te siento a mi lado en la clase, con tu envidiable ánimo entusiasta, sé lo mucho que te gustaría oír las clases que debo oír e interpretar en mi día a día, sé lo feliz que serías nutriéndote de toda esa información, de todos esos tesoritos, te encanta aprender cosas nuevas, pero te encantan esos empujoncitos para formar tu propia visión de todo
A veces (siempre) te imagino de vuelta a casa, sentados los dos, compartiendo nuestras mañanas, riéndonos, molestándonos, mirándonos y esperando llegar a la casa para poder dormir, sí dormir, algo que amo, algo que amas. Luego te veo en casa, ayudándome con los quehaceres, explicándome lo que hasta el día de hoy no logro entender, mostrándome el mundo con tus ojos, creyendo cambiar el mundo al hacerlo, soñando con nuestros hijos, esperando impacientes que estos 5 años pasen para poder ser uno.
Así pasa el tiempo y llega la noche, es momento de acostarse y antes de dormir, antes de dormir vuelvo a imaginar todo lo que imaginé en mi día, la sonrisa se vuelve inevitable ( es que acaso no sabes lo feliz que me haces? ) veo cada uno de nuestros momentos juntos en fotografías, fotografías en donde me veo iluminada, radiante, feliz, tranquila.
Al cansarme de imaginar, viene el sueño, sueños tranquilos, sueños que como todo en mi día-vida tienen olor a ti, sabor a ti. Y quizás consciente pero aún así ingenuamente creo que imaginándote presente con todas mis fuerzas, presente algún día estarás.
( o es que realmente te siento, te siento presente, y es por eso que se me hace inevitable )

No hay comentarios: